Para mí, la maternidad es un tema profundamente cercano a mi corazón, especialmente ahora que tengo dos pequeños. Cada vez que veo fotos de estos momentos, mi corazón se llena de ternura y amor. Adoro capturar los más pequeños detalles de la vida de un bebé y sus padres, y siempre he soñado con tener una sesión así con mi propia familia. Aunque dicen que en casa de herrero, cuchillo de palo, estos momentos que logro inmortalizar para otras familias, significan el mundo para mí.
Siempre intento que las sesiones de estudio se hagan lo más amenas posible, ya que es complicado prever las horas de sueño de los peques, sus estados de ánimo, etc. Normalmente no aguantan mucho rato de la sesión de fotos newborn, por lo cual intento capturar los momentos más bonitos de forma invisible, muy natural, para que la familia no se dé cuenta de que está en una sesión de fotos profesional.